Incahuara fue canalizada en un retiro peregrinaje que se realizó al monte del Sajama Bolivia, el Apu, Achachila de mayor altitud en territorio Boliviano. En ese peregrinaje fuimos a buscar las piedras volcánicas para la siembra del rezo del temazcal familiar comunitario en nuestra comunidad, se realizó un ayuno especial, una caminata a los nevados, se realizaron ofrendas y en la noche de vigilia, frente al fuego llego a mi mente la melodía, la cual la eleve en voz alta a los miembros de la comunidad y donde realice el coro y la primera estrofa, luego cada miembro participó en la creación de 8 estrofas de la versión original. Esta melodía se ha ido desarrollando con los años, solo la compartía en acapela en los temazcales o en círculos de mujeres o de canto en la ciudad de Cali. Una versión se grabó en Santa Marta Colombia, de una manera muy rústica, y después de 7 años esta melodía tomó una forma, integrandola y retomando el rezo, se le dió esta versión final.
Es una canción que está inspirada en nuestra convivencia y forma de vivir en la comunidad, donde fundé un proyecto de Ecoaldea en los yungas de Bolivia, en la comunidad Inkawara donde residen colonos Quechua y Aimara, allí liberamos un terreno inicialmente de 10 hectáreas hoy en día son 50 Hectáreas de bosque protegido. Allí me instalé dos años en medio de la naturaleza, en carpa, construyendo con nuestras manos todo el proyecto, y fuimos recibiendo personas voluntarias de todo el mundo y luego más integrantes a la comunidad. Finalmente el proyecto se donó a la comunidad Hare Krisna de la misión Brinda de Bolivia, actualmente es una reserva en protección.
Esta canción más que ser una letra linda, fue una realidad de mi vida, un tránsito por la selva y de llevar a cabo un sueño de comunidad, en convivencia pura con la naturaleza. Un sueño que permanece.
Percusión: Andres Mejia
Bajo: Oriol Rebull
Piano y Guitarra: Jorgelina Cángaro
Voz, letra y Arreglos musicales: Pacha magda
Voz apoyos y fondos: Jorgelina Cángaro
Graciación, Mezcla, Master: Pacha Magda
